Sombras Tenebrosas (Dark Shadows)
Fui a ver Sombras Tenebrosas (Dark Shadows) con unas amigas y la verdad es que nos encanto la película. Tim Burton es capaz de crear sus propios universos, llenarlos de cosas extrañas y aún así hacerte sentir parte de él y conmoverte. Si todo el cine comercial fuera así no habría escusas para no ir al cine. Salir de la sala, aún a pesar de que una botella de agua se derramara en un bolso, con una sonrisa y una gran sensación no es algo de lo que puedan conseguir muchas películas, aunque Sombras Tenebrosas si que lo hace. Sombras Tenebrosas nos cuenta la historia de Barnabas Collins, hijo de Joshua y Naomi Collins, que en el año 1752 zarpa desde Liverpool hacia América para hacer fortuna. Pero una terrible maldición cae sobre la familia. Veinte años después Barnabas (interpretado por Johnny Depp) tiene el mundo a sus pies, o al menos Collinsport en Maine. Barnabas, el dueño de Collinwood Manor, la casa familiar, es rico, poderoso y un mujeriego, pero esto cambia cuando comete el grave error de romperle el corazón a Angelique Bouchard (Eva Green). Angelique resulta ser una bruja y le condena a un destino mucho peor que la muerte, le convierte en vampiro y le entierra vivo. Dos siglos más tarde, Barnabas sale de su tumba y aparece en 1972 en un mundo muy distinto del que él conocía y regresa a Collinwood Manor para encontrarla en ruinas junto a los restos disfuncionales de la estirpe familiar. La matriarca, Elizabeth Collins Stoddard (Michelle Pfeiffer) ha recurrido a la psiquiatra Julia Hoffman (Helena Bonham Carter) para que le ayude con sus problemas familiares. Tambiñen estan en la casa el hermano mayor de Elizabeth, Roger Collins (Jonny Lee Miller); su rebelde hija adolescente Carolyn Stoddard (Chloe Moretz); y el