La afamada escritora Perra de Satán (si, creo que ya de puede decir que es afamada escritora por la cantidad de sitios en los que aparece tanto online como offline) ha sacado un nuevo libro. Tras poder disfrutar de las ocurrencias de Beatriz Cepeda, la maravillosa mente que se encuentra tras Perra de Satán, en Twitter, Instagram, Facebook, en las web en las que trabaja y colabora e incluso en alguna aparición estelar en la televisión ahora nos vuelve a sumergir en una historia completamente distinta. Tras Perra de Satán: Kilo arriba, kilo abajo llega Perra de Satán: ¡Es un escándalo!, una historia que no dejará indiferente a nadie.
Todos conocemos ya el irreverente tono con el que Perra de Satán suele enfrentarse al mundo, su visión crítica y deslenguada de la realidad y su fascinación por los penes o al menos deberías conocer todo eso ya si te has leído su primera novela. Aunque este segundo libro se suceda en el tiempo al primero podemos decir que no hace falta leerse uno para entender el otro, aunque si no te lo lees te estás perdiendo algo muy divertido y matices de un personaje que es más de lo que parece a simple vista.
Tenemos que tener claro que esta es una novela bien diferente de la primera, ya no solo porque Kilo arriba, kilo abajo fuera la historia de presentación de un personaje si no por la forma de enfocar cada una. Mientras que la primera no tenía una gran trama que se desarrollara a través de todos los capítulos y se basara más en el humor y los gags en esta segunda nos encontramos con una trama más densa, pero no por ello menos divertida, que será el gran pilar de todo este libro.
Perra de Satán: ¡Es un escándalo! comienza con una historia basada en hechos reales, en los hechos reales de la vida de @perradesatan, una boda en Sevilla, que para los que la sigáis en las redes sociales recordareis como la retransmitió en octubre de 2017 pero en Córdoba. Pero aquí hay mucha más chicha y aunque esté basada en hechos reales, la realidad aquí no tiene cabida. Porque como bien me dijo la propia autora en una declaraciones en exclusiva: «La gente no paraba de preguntarme qué partes de la novela eran verdad y cuáles no. Cuando escribí mi primer libro di por sentado que la gente sabría lo que es una novela. Así que dije «venga, que para esta segunda os lo voy a poner MUY FÁCIL.» Por lo que a partir de esa coincidencia inicial todo parecido con la realidad será pura coincidencia.
Justo mientras Perra y su mejor amigo se lo intentaban pasar lo mejor posible hay confesiones, recuerdos y la compra de un billete de lotería que más tarde les acabará tocando. Con el dinero del premio se van a Nueva York, allí conocen a Alaska (si, la cantante de Fangoria, pero de visita en Estados Unidos) y pasa lo más impactante e inesperado de esta novela, lo que se convertirá en la trama central de todo el libro, pero que creo que es mejor no desvelar todavía. Pero lo que si que puedo desvelar son algunas de las frases más míticas y citables que hay en toda la lectura:
«La felicidad no es como Beetlejuice, que si la nombras tres veces aparece de repente…»
«En las películas de Woody Allen nadie caga y a mí, al fin y al cabo, me encantan los chistes de pedos.
«A mi me gustan los tíos que marcan cabeza. Como Ernesto Sevilla.»
«Qué pereza un poeta, y más aún en los tiempos que corren, que al primero que se le pasa por la cabeza una frase que rime ya se cree Góngora, o se lo creería si supiera quién fue ese señor.»
«Yo soy más de recortar un poco el perímetro del amor y nada más, que si Dios puso pelo ahí abajo, por algo sería.»
«Malo sería que me fueran a preguntar por la lista de los colores que son tendencia este verano -el blanco, el blanco en invierno es choni pero en verano siempre es tendencia-, así que allá voy.»
«Dios es alfa y es omega y es el principio y el fin y él se hizo a sí mismo como Ana Patricia Botín.»
«Si Chenoa salió del chándal… ¡No voy a salir yo de esta!»
Hay muchas más frases dignas de mención pero creo que estás son mis favoritas. Con ellas podemos comprobar como el tono humorístico y la característica voz de Perra de Satán como personaje siguen frescos y delirantes como en su primer libro. Su carácter nos sigue pillando desprevenidos aunque lo que más nos va a dejar picuetos va a ser la trama principal, donde la fantasía cobra niveles bien altos y maravillosos. Aunque no por ello vamos a perder la Perra de Satán cotidiana, la que tiene problemas cada día, y es que aunque ocurra algo mágico y milagroso la historia se puede acercar más a un testimonio de Cuarto Milenio que a Harry Potter, aunque a la autora las dos cosas le encanten.
Ella quería dejar claro que en el universo de Perra todo es posible y creemos que lo ha conseguido. Ha llevado una de sus fantasías de adolescencia a la novela, y no, no es ser novia de Dani, el de El Canto del Loco, aunque Leonardo DiCaprio, al igual que Alaska si que tiene un papel en toda esta historia. De hecho ese margen de posibilidades tras ¡Es un escándalo! queda abierto para cualquier cosa aunque sin perder el norte y adentrarnos en mundos de mundos mágicos, unicornios y dragones.
Si hacemos una comparativa con el primer libro nos encontramos una historia quizá más madura, algo menos cómica, pero mucho más social. Esta claro que Perra de Satán no puede perder el humor, si no, no sería Perra de Satán, pero aquí los chistes, los comentarios fuera de lugar y las salidas de tono son recursos para aderezar una historia mucho más centrada en como se siente ella, en lo que le pasa y lo que le rodea. Al final ambas novelas tratan sobre la superación, de aprender lecciones vitales, y eso se acaba transmitiendo al lector, cosa que otros best sellers no consiguen.
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Otra diferencia es que las ilustraciones de Ana Belén Rivero, quien también dibujo la primera, ya no están en Egogram, la red social que se inventaron para retratar las fantasías de nuestra protagonista. Aquí cada imagen es un fragmento de lo que nos encontraremos en cada capítulo y nos adelanta en alguna ocasión una información que no llegamos a entender del todo hasta que la hemos leído.
En general me ha gustado, pero un poco menos que la primera, quizá porque me esperaba más momentos humorísticos y aquí hay una historia más elaborada. Lo que si que me ha encantado es como ha integrado todas esas cosas que le gustan, como autora, y de las que hablas en las redes sociales de una forma tan coherente y cohesionada. Aunque hay un momento hacia el final, uno de los puntos álgidos de la trama que se me ha hecho un poco pesado y confuso, creo que está bien porque también transmite como se encuentra Perra en ese momento.
Pero en general si que me ha gustado, me ha dejado muy descolocado en muchos momentos, me ha revuelto en mi sitio mientras pasaba las páginas y me ha gustado encontrarme con personajes nuevos que aparecen a lo largo de toda la historia y no solo en un capítulo como en Kilo arriba, kilo abajo. De nuevo, necesito más paginas para poder sumergirme en el mundo de Perra de Satán y sentirme completamente satisfecho, aunque si el cansancio y extenuación que dice sentir nuestra querida Beatriz al haber escrito Perra de Satán: ¡Es un escándalo!, podemos darnos por satisfechos. Ya tendremos tiempo de un gran novelón que nos deje días sin movernos solo por disfrutar su comicidad y saber que pasa.