Actualizado: 10/11/2017
Ha regresado, el italiano Giorgio Moroder, una de las figuras más importantes de la música pop, disco y electrónica desde los años setenta. El ha sido productor de Donna Summer, Bondie, Freddie Mercury, Elton John, Jannet Jackson, Kylie Minogue o Daft Punk entre muchos otros al igual que de algunas bandas sonoras bastante relevantes. Su último disco como artista principal fue en 1985 y tras un periodo en el que parecía que había desaparecido vuelve con fuerza para estrenar Déjà Vu, su decimotercer álbum de estudio que verá la luz en el verano de este mismo año. Para adelantarnos lo que nos podremos esperar de este trabajo en el que aparecerán colaboradores de lujo como Britney Spears, Sia, Charli XCX, Mikky Ekko, Foxes o Matthew Koma, estrena Right Here, Right Now donde la australiana Kylie Minogue presta su voz para conseguir un éxito disco donde los dos estilos de los dos músicos se une.
Tras casi treinta años fuera de la música Giorgio Moroder regresa por todo lo alto. Ahora planea estrenar su decimotercer álbum de estudio titulado Déjà Vu, que verá la luz en el verano de este año y que contará con grandes artistas actuales para volver a llevar el nombre de Moroder a lo más alto de las listas. El primer single que se desprende de este disco es Right Here, Right Now, donde la australiana Kylie Minogue ha prestado su voz para crear algo muy disco. La canción ha sido escita por Giorgio, Patrick Jordan-Patrikios, Karen Poole y David Etherington y ha sido producida por el italiano junto a Roman Lüth. Sobre una base de sintetizadores con tendencia a sonar retro la pista arranca como si fuer un disco rallado mientras se suman ritmos y demás elementos para que Kylie con su luminosa, optimista y sexy voz empiece a cantar. El espíritu funk empieza a apoderarse de la pista hasta llegar al estribillo donde la electrónica atmosférica crea un parón que le da actualidad a esta pista que tendía a rememorar el pasado. Una fusión perfecta entre el disco del siglo pasado y el disco electrónico actual con un estribillo muy pegadizo.
El vídeo ha sido dirigido por Daniel Börjesson que ha utilizado efectos de vídeo estilo caleidoscopio y de televisión antigua para mostrarnos a los dos artistas interpretando el tema por separado. Sobre un suelo de triángulos gigantes blanco y negros Kylie aparece tumbada con un vestido brillante que le permite mostrar las piernas sensualmente. De pronto la australiana aparece en un fondo negro moviéndose en un vídeo que la duplica y desnaturaliza sus movimientos, también la vemos sentada en un triángulo blanco mientras otros triángulos transforman la imagen. En una escena caleidoscópica la cantante se duplica sobre si misma y sigue cantando y moviéndose mientras Moroder aparece en la mesa de mezclas entre las sombras. Los triángulos parecen la forma para Minogue pues esta aparece y desaparece entre ellos, incluso se convierten en su eco. Un vestido negro y largo con grandes aberturas, obra del estilista Nicolas Bru saca toda la sensualidad de Kylie, aunque en el efecto caleidoscopio la vemos con uno de lentejuelas que saca su lado más disco.
Los efectos de vídeo son la baza principal aquí, líneas blancas que aparecen y desapareen para introducirnos a la cantante multiplicada de mil maneras, como un caleidoscopio, replicada en diferentes tamaños moviéndose a la vez, en triángulos o en imágenes que se convierten en las líneas de sonido que suben y bajan. Los movimientos sensuales de Minogue no son aleatorios si no que detrás de ellos se esconde su sensualidad natural y el coreógrafo Blake McGrath que añade ese toque diferente. Así el videoclip es una sucesión algo psicodélica, en tonos negros, blanco y grises que recoge el espíritu disco de antaño fusionándolo con la elegancia y la modernidad actuales, tal y como hace la canción. La verdad es que Moroder queda consumido en protagonismo en función de la australiana pues el solo aparece fugazmente moviéndose levemente al ritmo y manejando los controles mientras ella despliega todo su sex-appeal.
Es una pena que Giordio Moroder haya pasado tanto tiempo fuera de escena, pues en todo este tiempo lo más seguro es que nos hubiera regalado grandes temas como el Call Me de Blondie, del que ene su día fue productor. Al menos ha regresado y lo ha hecho por todo lo alto, Déjà Vu será su decimotercer disco de estudio y cuenta con colaboradores de lujo. El primer single extraído del disco ha sido Right Here, Right Now donde Kylie Minogue aporta sus propios ingredientes para conseguir una mezcla pegadiza, hipnótica y con un gran espíritu disco. Una fusión perfecta del pasado y el presente que puede dar muy buenos resultado tanto en la radio comercial como en las listas especializadas de música electrónica y dance. El video, aunque podría haber sido algo con más sustancia no está mal del todo. La edición ha aportado en cada momento elementos de una época más analógico y otros de un cierto futurismo, ese que parecen buscar ciertas tendencias actuales. El resto lo aporta Minogue con su gran sensulidad que con cada movimiento es capaz de atraparte para que no dejes de mirar.
Aquí os dejo la letra original de la canción y su traducción al castellano
When the lights start flashing (Yeah) I can look for love Staring in your eyes, I see the sun rise Oooohhhhhh It’s a never ending (Yeah) I can look for love Staring in your eyes, I see the sun rise Oooohhhhhh Do it right here, right now tonight Cause the way that you hold me tonight Oooohhhhhh |
Cuando las luces comienzan a parpadear Puedes abrir los ojos Y la montaña más alta Es el que has escalado (Sí) Puedo buscar el amor Mirando en tus ojos, veo salir el sol Oooohhhhhh Esto nunca acabará (Sí) Puedo buscar el amor Mirando en tus ojos, veo salir el sol Oooohhhhhh Hazlo aquí, ahora mismo esta noche Porque la forma en que me abrazas esta noche Oooohhhhhh |